Nos quejamos de vicio.
Y por eso del anonimato y el halo de
misterio que atrae me limitarse a contar situaciones pero no a dar nombres para
poder identificarnos con alguien que seguro todos conocemos.
Parece que las cuestas arriba solo son importantes desde
abajo, y una vez que tocamos la cima todo el trabajo de antes no vale de nada.
No hablo de esfuerzos en relación a vida laboral o esfuerzos para conseguir
metas personales. Hablo de esfuerzos que conllevan ganar o perderlo todo.
Hablo
de una lucha entre vivir, o pasar a "mejor vida" como diría aquel.
Creo, que podrías ser ejemplo de superación para mucha gente
y creo que si alguien puede hablar de las cosas eres tú que luchas. Tú qué
alguna que otra vez has tenido casi un pie más allá que acá, y tú que has
dejado que unos de verde den rienda suelta a su imaginación entre
duodeno,yeyuno e íleon.
Qué difícil es valorar nimiedades cuando has tenido
cosas de las que de verdad preocuparte. Y qué rabia da que los pensamientos que
concurren continuamente como metros pasando sean la mayoría tan burdos y
absurdos.
Tú que luchas entre más o menos cicatrices cerca del ombligo
porque no se portó como se tenían que portar esas laparoscopias.
Supiste agarrarle de la corbata al miedo y decirle: -Mira
imbécil, no estoy para bromas- con una sonrisa de oreja a oreja.
Identificaos con todos esos casos de luchadores que tenéis en
vuestro día a día, espero que no hayáis sido vosotros.
Y si eres tú, lo siento por caer en la tentativa de lo burdo
pero es nuestra vida de escape. Y enhorabuena por haber sido ejemplo por y para
tanta gente.
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